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| La vida partida en dos, Paseo Concepción Arenal, frente a la estatua de Blasco Ibáñez |
Ayer, en el Paseo de Concepción
Arenal, de Burjassot, junto a la estatua de Vicente Blasco Ibáñez, terminé de leer la
magnífica novela de Antonio Andújar Castro: La vida partida en dos.
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| Junto con María Nieves Michavila y Antonio Andújar en la presentación de Caricias rotas |
Siempre me apasionó Egipto,
incluso; cuando no era un desempleado y podía permitirme el lujo de viajar,
llegué a contratar en un viaje de quince días a Egipto; aunque, al final
terminamos viajando a Grecia por problemas de terrorismo integrista.
Antonio Andújar Castro, ha conseguido en
cierto modo suplir ese imposible viaje a Egipto de la mano de Ariadna, una
mujer con inquietudes un tanto especiales.
La vida Partida en dos (Reseña)
Un apasionante viaje a la Valencia de los años 30 y a un Egipto mágico de la mano de Antonio Andújar Castro, sin salir de tu casa.
Ariadna es una mujer
narcisista, incapaz de ver, amar o sentir, más allá de su belleza, comparable
tan solo con la fotografía de un papel de la reina Nefertiti, reina de la
dinastía XVIII de Egipto, la segunda Gran Esposa Real de Akenatón.
La acción comienza en una
España que despierta y eclosiona con la proclamación de la República, en una Valencia plagada de actos culturales de primer orden, sin nada que envidiar a otras ciudades más grandes como Madrid o Barcelona. Alrededor de Ariadna la ciudad bulle en todos los sentidos; sin
embargo, ella vive ajena a los acontecimientos. Ante sus bellos ojos verdes solo ve aquel retrato de una reina del antiguo Egipto, como si
Nefertiti fuese el fin último de su existencia, y bastase ir a la tierra de los faraones, algo ya de por sí difícil, y conocerla en
persona.
Fría y calculadora, Ariadna
será capaz de casarse por interés con un hombre al que no ama, de renunciar al
amante que le hace vibrar en la cama, de prometer favores a sebosos políticos
babeantes; incluso, abandonar a su hijo, con tal de ir en pos de la reina
Nefertiti. ¿Lo conseguiría...?
En la novela Antonio Andújar
Castro, nos muestra un más que fascinante Egipto, ante nosotros aparecen
ciudades como Alejandría, El Cairo, Tebas. Nos habla de dinastías, reinas,
mitología fascinante, beduinos, traficantes, de tesoros, de esclavas… Con una
naturalidad pasmosa nos muestra un país que conoce bien, incluso nos lleva
hasta lugares aún más remotos..., describiéndonos los fulgurantes desiertos estrellados
de nuevos territorios. Todo esto entre constantes dudas interiores de la
protagonista: amores de hombres que la aman y la desean y amores de hombres que
ella desea, pero no ama. ¿Quién será cada uno de esos hombres?
Ariadna, al contrario que Narciso,
¿se volverá humana y mostrará sentimientos que creía imposible sentir...?
He disfrutado con la novela,
en ocasiones me ha emocionado, y en algunos momentos me he sentido parte de
ella. Tiene todos los ingredientes de una buena novela, amor, tensión,
fantasía, y como no podía ser de otro modo, siendo su autor, además de un buen
escritor, psicólogo, mucha sicología en la construcción de los personajes;
pero, también una mirada a nuestro interior autocomplaciente que todos tenemos.
Gracias Antonio Andújar por
tan buenos momentos con tu novela “La vida partida en dos”.
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