Subo las escaleras a
oscuras
armado de sueños
olvidados
en batalla perdidas
en añojales yermos
dispuesto a combatir la
desesperanza.
Debería, lo sé,
debería agarrarme a la
barandilla,
encender la luz
de esa bombilla
a punto de fundirse.
Tengo miedo,
no al dolor,
no a la muerte,
ni siquiera a las
traiciones...
Tengo miedo a ese último
aliento
que me ayude a
continuar,
a seguir trabajando,
no abriendo fosas,
ni haciendo
revoluciones,
sí a seguir mis pasos,
subiendo escaleras
sin saber dónde...
hasta ese último aliento
en que no sea capaz
de escribir ese último verso.
©Paco Arenas
No hay comentarios:
Publicar un comentario