Quienes no sois de pueblo,
quienes no habéis tenido gallinas en el corral y habéis hecho vuestras
necesidades en el mismo, porque entonces no había inodoros y lo hacíamos en el
corral, con las gallinas alrededor y cuando terminábamos de hacerlo, no quedaba
ni rastro porque las gallinas se lo habían comido –algunos diréis que asco-
pero aquellos huevos que ponían esas gallinas, eran el mejor de los manjares,
más si se freían con aceite de oliva virgen de Pinarejo, de 2º , “bocata de
cardinale”, si además en ese aceite había frito tu madre una sardinas, no te
quiero ni decir, eso ya era el no va más, por si fuese poco, con vino pisado
por tu padre y pan amasado por tu madre. Para perder el sentido.
Quienes no habéis conocido eso
nunca llegareis a saber lo que realmente es gozar comiendo un huevo frito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario