El miedo ata con fuerza,
ansias y sueños de libertad.
Tristes los cánticos de los ruiseñores,
si sus alas están cortadas
o tras los barrotes ven cielo.
Ríe, ahora que todavía estás a tiempo.
Miró, escuchó y calló.
¿Qué más puede pasar?
Donde hubo hombres valientes,
guerrilleros temerarios,
hoy hay cabestros,
que bajan la cabeza como bueyes.
Hoy toca desahucio, para desayunar,
desahucio para comer y cenar,
la nieve cubre con su manto invernal
la inocente vida que se esconde,
tras la cortina de la casa robada…
¿Quién le protegerá del frío invernal.
Tanto tiempo perdido en este profundo pozo…
Sin agua
con el imperturbable miedo sobre el frío brocal,
como si fuesen calaveras no muertas,
de hombres agonizantes, risas cortadas por el silencio.
Caballo de Alberti, caballo de España,
Despierta, despierta tu furia,
Cabalga, cabalga, cabalga…
La libertad llevas por montura,
Que tiemblen coronas bajo tus cascos.
Furia de España, despierta,
Mira al frente, corre, cabalga…
¡A galopar,
a galopar,
hasta enterrarlos en el mar!
Poema incluido en el libro :
Las abarcas del campesino analfabeto que soñó ser poeta
Poema incluido en el libro :
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